La oscura historias que hay atrás de la Trata de Personas y la Prostitución en el Norte de Salta
Nos dirigimos a la ciudad de Embarcación ubicada a 41 km de la Ciudad de Orán, sobre la ruta 34, la ruta de la droga y que también es la ruta de otras irregularidades como la trata de personas y la prostitución.
Hay casos ya judicializados sobre la trata en el norte del país, uno de los resonantes se dio hace no más de 40 días aproximadamente cuando una menor de edad fue rescatada por la justicia federal de Orán en ejercicio de la prostitución y el sometimiento, cuando hablamos de sometimiento no solo es el sometimiento por intermedio de los que se conoce como proxeneta, sino hay sometimiento psicológico y orgánico como lo es la droga sobre todo en los chicos.
Esta niña que fue rescatada de una estación de servicio en el momento justo cuando se iba a cometer otro hecho de los tantos por lo que le toco atravesar con su corta edad, hasta que la Justicia llego a rescatarla y brindarle otra posibilidad en su vida, vida que al día de hoy se trata de recuperar y de poder encauzar, así como esta historia que tomo conocimiento público hace unos días atrás, en el norte del país en especial en Embarcación se han dado otros casos de mujeres en ejercicio de la prostitución, como el caso de las últimas 48 horas en donde se allano un bar disfrazado de bar, pero que en realidad allí había algo más que bebidas y música, había dentro de este local mujeres que ejercían la prostitución y que lo habrían hecho en las habitaciones encontradas en la parte posterior del mismo, en donde estas mujeres por un cobro de 50 pesos por media hora alguien se las alquilaba y este alguien sería un masculino que la justicia federal deberá documentar.
Pero más allá de lo terrorífico de ir a un bar y saber que en el fondo hay habitaciones que se alquilan a bajo precio para que dentro de las mismas sucedan las cosas y nadie se entere, también en estas precarias piezas carentes de higiene, con preservativos usados diseminados por toda la habitación, con una clientela mayoritariamente conocidos en la localidad como picheros, la droga y el micro trafico estaban presente.
Luego del allanamiento por parte de la justicia federal estas mujeres pidieron absoluta reserva sobre sus identidades ya que temen sufrir el estigma que les pesa a las mujeres que ofrecen sexo por intercambio de dinero.
Hoy hay muchas aristas a seguir en la línea investigativa sobre todo de cómo estaba tejida esta red en donde el bar era la miel para la mosca y en donde la facilitación para el sexo también está reglamentada y penada por lo que habrá que conocer a fondo si quienes son los propietarios del inmueble tenían conocimiento sobre lo que sucedía allí y quien es aquel hombre que les cobraba 50 pesos por media hora a las chicas para usar la habitación que se encontraba disponible desde la medianoche hasta entrada la madrugada con la explotación entre comillas de estas mujeres que servían para atraer clientes al bar y para que se consuma el alcohol en algunos jóvenes de dudosa procedencia que eran habitué del lugar y claro esta estos 50 pesos que encima les cobraban en concepto de alquiler de las piezas.
La Justica federal deberá devolverles a estas víctimas un poco de la integridad avasallada por la situación vivida hasta que la justicia llego…
Investigación periodística: diario el oranense